And he said unto me, go in Into the room or chamber the door opened into: and behold the wicked abominations they do here; the idolatries there committed, wicked in themselves, and abominable to God.
7
Luego me llevó a la puerta del atrio del templo, donde pude ver un hueco en el muro.
8
Me dijo: «Ahora, hijo de hombre, cava en el muro». Entonces cavé en el muro y hallé una entrada escondida.
9
«¡Entra —me dijo—, y mira los pecados perversos y detestables que cometen ahí!».
10
Entonces entré y vi las paredes grabadas con toda clase de reptiles y criaturas detestables. También vi los diversos ídolos a los que rendía culto el pueblo de Israel.
11
Allí había de pie setenta líderes de Israel y en el centro estaba Jaazanías, hijo de Safán. Todos tenían en la mano un recipiente para quemar incienso y de cada recipiente se elevaba una nube de incienso por encima de sus cabezas.