Juan 10:2-12

2 Pero el que entra por la puerta es el pastor de las ovejas.
3 El portero le abre la puerta, y las ovejas reconocen la voz del pastor y se le acercan. Él llama a cada una de sus ovejas por su nombre y las lleva fuera del redil.
4 Una vez reunido su propio rebaño, camina delante de las ovejas, y ellas lo siguen porque conocen su voz.
5 Nunca seguirán a un desconocido; al contrario, huirán de él porque no conocen su voz.
6 Los que oyeron a Jesús usar este ejemplo no entendieron lo que quiso decir,
7 entonces les dio la explicación:
8 Todos los que vinieron antes que yo
eran ladrones y bandidos, pero las verdaderas ovejas no los escucharon.
9 Yo soy la puerta; los que entren a través de mí serán salvos.
Entrarán y saldrán libremente y encontrarán buenos pastos.
10 El propósito del ladrón es robar y matar y destruir; mi propósito es darles una vida plena y abundante.
11 »Yo soy el buen pastor. El buen pastor da su vida en sacrificio por las ovejas.
12 El que trabaja a sueldo sale corriendo cuando ve que se acerca un lobo; abandona las ovejas, porque no son suyas y él no es su pastor. Entonces el lobo ataca el rebaño y lo dispersa.
Esta Biblia es una edición de la Santa Biblia, Nueva Traducción Viviente. La Santa Biblia, Nueva Traducción Viviente, © Tyndale House Foundation, 2010. Todos los derechos reservados. Visite Tyndale en Internet: www.BibliaNTV.com y www.tyndaleespanol.com.