Jeremías 2:28

28 ¿Y dónde están tus dioses que hiciste para ti? Levántense, a ver si te podrán librar en el tiempo de tu aflicción; porque según el número de tus ciudades, oh Judá, fueron tus dioses

Jeremías 2:28 Meaning and Commentary

Jeremiah 2:28

But where are thy gods that thou hast made thee?
&c.] This is, or would be, the Lord's answer to them, what is become of your gods? why do not you apply to them for help in time of trouble? the gods that you have chosen for yourselves and worshipped; the gods, not that made you, but whom you yourselves have made: let them arise, if they can save thee in the time of thy trouble;
call upon them to arise, those statues of wood and stone, those lifeless and senseless images; let them rise off their seats, and move out of their places, if they can, and see whether they can save in a time of trouble and distress; for there is enough of them, if numbers will do: for according to the number of thy cities are thy gods, O Judah;
in imitation of the Heathens, who had not only in every country, but in every city and town, a different god, the patron and tutelar deity of the place; see ( 2 Kings 17:29-31 ) . The Septuagint and Arabic versions "add, according to the number of the ways, or streets, of Jerusalem", they sacrificed to Baal; see ( Jeremiah 11:13 ) .

Jeremías 2:28 In-Context

26 Como se avergüenza el ladrón cuando es tomado, así se avergonzará la Casa de Israel, ellos, sus reyes, sus príncipes, sus sacerdotes, y sus profetas

27 que dicen al leño: Mi padre eres tú; y a la piedra: Tú me has engendrado; pues me volvieron la cerviz, y no el rostro; y en el tiempo de su trabajo dicen: Levántate, y líbranos

28 ¿Y dónde están tus dioses que hiciste para ti? Levántense, a ver si te podrán librar en el tiempo de tu aflicción; porque según el número de tus ciudades, oh Judá, fueron tus dioses

29 ¿Por qué porfías conmigo? Todos vosotros os rebelasteis contra mí, dijo el SEÑOR

30 Por demás he azotado vuestros hijos; no han recibido corrección. Vuestra espada devoró a vuestros profetas como león destrozador