Génesis 31:37

37 Has registrado todas mis pertenencias. ¡Muéstrame ahora lo que hayas encontrado que sea tuyo! Ponlo aquí delante de nosotros, a la vista de nuestros parientes, para que todos lo vean. ¡Que ellos juzguen entre nosotros!

Génesis 31:37 Meaning and Commentary

Genesis 31:37

Whereas thou hast searched all my stuff
Or all my vessels F14, or utensils; whether household goods, or such as were used with regard to the cattle, or armour for defence: what hast thou found of all thy household stuff?
is there any vessel or utensil, or anything whatever thou canst claim as thine own? is there anything that has been taken away from thee either by me or mine? set [it] here before my brethren and thy brethren;
publicly before them all, and let it be thoroughly inquired into whose property it was, and whether lawfully taken or not: that they may judge betwixt us both;
Jacob was so conscious to himself of his own uprightness, that he could safely leave anything that might be disputed in arbitration with the very men that Laban had brought with him: it was so clear a case that he had not wronged him of anyone thing.


FOOTNOTES:

F14 (ylk lk) "omnia vasa mea", Montanus, Munster, Vatablus, Drusius, Schmidt.

Génesis 31:37 In-Context

35 ella le dijo a su padre: «Por favor, perdone, mi señor, si no me levanto ante usted. Es que estoy con mi período menstrual». Labán, pues, continuó su búsqueda, pero no pudo encontrar los ídolos de familia.
36 Entonces Jacob se enojó mucho y desafió a Labán.
—¿Cuál es mi delito? —preguntó él—. ¿Qué mal he hecho para que me persigas como si fuera un criminal?
37 Has registrado todas mis pertenencias. ¡Muéstrame ahora lo que hayas encontrado que sea tuyo! Ponlo aquí delante de nosotros, a la vista de nuestros parientes, para que todos lo vean. ¡Que ellos juzguen entre nosotros!
38 »Durante veinte años he estado contigo, cuidando de tus rebaños. En todo ese tiempo, tus ovejas y tus cabras nunca abortaron. En todos esos años, nunca tomé ni un solo carnero tuyo para comérmelo.
39 Si alguno de ellos era atacado por animales salvajes y moría, yo nunca te mostraba el cadáver ni te pedía que lo descontaras de tu rebaño. No, ¡yo mismo me hacía cargo de la pérdida! Tú me hacías pagar por cada animal robado, ya fuera a plena luz del día o en la oscuridad de la noche.
Esta Biblia es una edición de la Santa Biblia, Nueva Traducción Viviente. La Santa Biblia, Nueva Traducción Viviente, © Tyndale House Foundation, 2010. Todos los derechos reservados. Visite Tyndale en Internet: www.BibliaNTV.com y www.tyndaleespanol.com.