64
Jesús le dijo: Tú lo has dicho; y aun os digo, que desde ahora habéis de ver al Hijo del hombre sentado a la diestra de la potencia, y que viene en las nubes del cielo
65
Entonces el sumo sacerdote rasgó sus vestidos, diciendo: Ha blasfemado; ¿qué más necesidad tenemos de testigos? He aquí, ahora habéis oído su blasfemia
66
¿Qué os parece? Y respondiendo ellos, dijeron: Culpado es de muerte
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Entonces le escupieron en su rostro, y le dieron de bofetadas; y otros le herían con las varas
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diciendo: Profetízanos, oh Cristo, quién es el que te ha herido
69
Y Pedro estaba sentado fuera en el patio; y se llegó a él una criada, diciendo: Y tú con Jesús el Galileo estabas
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Mas él negó delante de todos, diciendo: No sé lo que dices
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Y saliendo él a la puerta, le vio otra, y dijo a los que estaban allí: También éste estaba con Jesús Nazareno
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Y negó otra vez con juramento: No conozco al hombre
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Y un poco después llegaron los que estaban por allí, y dijeron a Pedro: Verdaderamente también tú eres de ellos, porque aun tu habla te hace manifiesto
74
Entonces comenzó a imprecarse, y a jurar, diciendo: No conozco al hombre. Y un gallo cantó luego