2 Samuel 19:6

6 ¡Usted ama a quienes lo odian, y odia a quienes lo aman! Hoy ha dejado muy en claro que nada le importan sus generales ni sus soldados. Ahora me doy cuenta de que usted preferiría que todos nosotros estuviéramos muertos, con tal de que Absalón siguiera con vida.

2 Samuel 19:6 Meaning and Commentary

2 Samuel 19:6

In that thou lovest thine enemies, and hatest thy friends
Which though not strictly true, there was some appearance of it, which is here greatly exaggerated; in that he expressed so much grief and sorrow for Absalom his enemy, who had rebelled against him, and showed so little regard to his friends, that had exposed their lives for him:

for thou hast declared this day:
by his conduct and behaviour, mourning for his rebellious son, and taking no notice of his faithful servants:

that thou regardest neither princes nor servants;
neither the officers of the army, the generals and captains, nor the common soldiers: since neither the one were admitted into his presence privately, nor had the other public thanks as they entered the city, as might have been expected: or "that thou hast no princes and servants" ^F7; none that are accounted of as such; they are nothing with thee, in no esteem at all, as if thou hadst none:

for this day I perceive that if Absalom had lived, and all we had died
this day, then it had pleased thee well;
this was carrying the matter too far; for though it would have been agreeable to David if Absalom had lived, and not been slain, yet not that his army should perish, or his people be destroyed; it would have pleased him well if both had lived.

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FOOTNOTES:

F7 (Mydbew Myrv Kl Nya) "non tibi principes et servi", Pagninus, Montanus; "nihil tibi sint principes et servi", Piscator.

2 Samuel 19:6 In-Context

4 Pero el rey, cubriéndose la cara, seguía gritando a voz en cuello: «¡Ay, Absalón, hijo mío! ¡Ay, Absalón, hijo mío, hijo mío!»

5 Entonces Joab fue adonde estaba el rey y le dijo: «Hoy Su Majestad ha llenado de vergüenza a todos sus siervos que le salvaron la vida, y la de sus hijos e hijas y esposas y concubinas.

6 ¡Usted ama a quienes lo odian, y odia a quienes lo aman! Hoy ha dejado muy en claro que nada le importan sus generales ni sus soldados. Ahora me doy cuenta de que usted preferiría que todos nosotros estuviéramos muertos, con tal de que Absalón siguiera con vida.

7 ¡Vamos! ¡Salga usted y anime a sus tropas! Si no lo hace, juro por el SEÑOR que para esta noche ni un solo soldado se quedará con usted. ¡Y eso sería peor que todas las calamidades que Su Majestad ha sufrido desde su juventud hasta ahora!»

8 Ante esto, el rey se levantó y fue a sentarse junto a la puerta de la ciudad. Cuando los soldados lo supieron, fueron todos a presentarse ante él.Los israelitas, mientras tanto, habían huido a sus hogares,