Salmos 5; Salmos 38; Salmos 41; Salmos 42

Viewing Multiple Passages

Salmos 5

1 ESCUCHA, oh Jehová, mis palabras; Considera la meditación mía.
2 Está atento á la voz de mi clamor, Rey mío y Dios mío, Porque á ti oraré.
3 Oh Jehová, de mañana oirás mi voz; De mañana me presentaré á ti, y esperaré.
4 Porque tú no eres un Dios que ame la maldad: El malo no habitará junto á ti.
5 No estarán los insensatos delante de tus ojos: Aborreces á todos los que obran iniquidad.
6 Destruirás á los que hablan mentira: Al hombre de sangres y de engaño abominará Jehová.
7 Y yo en la multitud de tu misericordia entraré en tu casa: Adoraré hacia el templo de tu santidad en tu temor.
8 Guíame, Jehová, en tu justicia á causa de mis enemigos; Endereza delante de mí tu camino.
9 Porque no hay en su boca rectitud: Sus entrañas son pravedades; Sepulcro abierto su garganta: Con su lengua lisonjearán.
10 Desbarátalos, oh Dios; Caigan de sus consejos: Por la multitud de sus rebeliones échalos, Porque se rebelaron contra ti.
11 Y alegrarse han todos los que en ti confían; Para siempre darán voces de júbilo, porque tú los defiendes: Y en ti se regocijarán los que aman tu nombre.
12 Porque tú, oh Jehová, bendecirás al justo; Lo cercarás de benevolencia como con un escudo.
The Reina-Valera Antigua (1602) is in the public domain.

Salmos 38

1 JEHOVA, no me reprendas en tu furor, Ni me castigues en tu ira.
2 Porque tus saetas descendieron á mí, Y sobre mí ha caído tu mano.
3 No hay sanidad en mi carne á causa de tu ira; Ni hay paz en mis huesos á causa de mi pecado.
4 Porque mis iniquidades han pasado mi cabeza: Como carga pesada se han agravado sobre mí.
5 Pudriéronse, corrompiéronse mis llagas, A causa de mi locura.
6 Estoy encorvado, estoy humillado en gran manera, Ando enlutado todo el día.
7 Porque mis lomos están llenos de irritación, Y no hay sanidad en mi carne.
8 Estoy debilitado y molido en gran manera; Bramo á causa de la conmoción de mi corazón.
9 Señor, delante de ti están todos mis deseos; Y mi suspiro no te es oculto.
10 Mi corazón está acongojado, hame dejado mi vigor; Y aun la misma luz de mis ojos no está conmigo.
11 Mis amigos y mis compañeros se quitaron de delante de mi plaga; Y mis cercanos se pusieron lejos.
12 Y los que buscaban mi alma armaron lazos; Y los que procuraban mi mal hablaban iniquidades, Y meditaban fraudes todo el día.
13 Mas yo, como si fuera sordo no oía; Y estaba como un mudo, que no abre su boca.
14 Fuí pues como un hombre que no oye, Y que en su boca no tiene reprensiones.
15 Porque á ti, oh Jehová, esperé yo: Tú responderás, Jehová Dios mío.
16 Porque dije: Que no se alegren de mí: Cuando mi pie resbalaba, sobre mí se engrandecían.
17 Empero yo estoy á pique de claudicar, Y mi dolor está delante de mí continuamente.
18 Por tanto denunciaré mi maldad; Congojaréme por mi pecado.
19 Porque mis enemigos están vivos y fuertes: Y hanse aumentado los que me aborrecen sin causa:
20 Y pagando mal por bien Me son contrarios, por seguir yo lo bueno.
21 No me desampares, oh Jehová: Dios mío, no te alejes de mí.
22 Apresúrate á ayudarme, Oh Señor, mi salud.
The Reina-Valera Antigua (1602) is in the public domain.

Salmos 41

1 BIENAVENTURADO el que piensa en el pobre: En el día malo lo librará Jehová.
2 Jehová lo guardé, y le dé vida: sea bienaventurado en la tierra, Y no lo entregues á la voluntad de sus enemigos.
3 Jehová lo sustentará sobre el lecho del dolor: Mullirás toda su cama en su enfermedad.
4 Yo dije: Jehová, ten misericordia de mí; Sana mi alma, porque contra ti he pecado.
5 Mis enemigos dicen mal de mí preguntando: ¿Cuándo morirá, y perecerá su nombre?
6 Y si venía á ver me, hablaba mentira: Su corazón se amontonaba iniquidad; Y salido fuera, hablába la.
7 Reunidos murmuraban contra mí todos los que me aborrecían: Contra mí pensaban mal, diciendo de mí:
8 Cosa pestilencial de él se ha apoderado; Y el que cayó en cama, no volverá á levantarse.
9 Aun el hombre de mi paz, en quien yo confiaba, el que de mi pan comía, Alzó contra mí el calcañar.
10 Mas tú, Jehová, ten misericordia de mí, y hazme levantar, Y daréles el pago.
11 En esto habré conocido que te he agradado, Que mi enemigo no se holgará de mí.
12 En cuanto á mí, en mi integridad me has sustentado, Y me has hecho estar delante de ti para siempre.
13 Bendito sea Jehová, el Dios de Israel, Por siglos de siglos. Amén y Amén.
The Reina-Valera Antigua (1602) is in the public domain.

Salmos 42

1 COMO el ciervo brama por las corrientes de las aguas, Así clama por ti, oh Dios, el alma mía.
2 Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo: ¡Cuándo vendré, y pareceré delante de Dios!
3 Fueron mis lágrimas mi pan de día y de noche, Mientras me dicen todos los días: ¿Dónde está tu Dios?
4 Acordaréme de estas cosas, y derramaré sobre mí mi alma: Cuando pasaré en el número, iré con ellos hasta la casa de Dios, Con voz de alegría y de alabanza, haciendo fiesta la multitud.
5 ¿Por qué te abates, oh alma mía, Y te conturbas en mí? Espera á Dios; porque aun le tengo de alabar Por las saludes de su presencia.
6 Dios mío, mi alma está en mí abatida: Acordaréme por tanto de ti desde tierra del Jordán, Y de los Hermonitas, desde el monte de Mizhar.
7 Un abismo llama á otro á la voz de tus canales: Todas tus ondas y tus olas han pasado sobre mí.
8 De día mandará Jehová su misericordia, Y de noche su canción será conmigo, Y oración al Dios de mi vida.
9 Diré á Dios: Roca mía, ¿por qué te has olvidado de mí? ¿Por qué andaré yo enlutado por la opresión del enemigo?
10 Mientras se están quebrantando mis huesos, mis enemigos me afrentan, Diciéndome cada día: ¿Dónde está tu Dios?
11 ¿Por qué te abates, oh alma mía, Y por qué te conturbas en mí? Espera á Dios; porque aun le tengo de alabar; Es él salvamento delante de mí, y el Dios mío.
The Reina-Valera Antigua (1602) is in the public domain.