Nehemías 11:1

1 Los jefes del pueblo habitaron en Jerusalén, pero el resto del pueblo echó suertes a fin de traer uno de cada diez para que habitara en Jerusalén, la ciudad santa, mientras los otros nueve se quedarían en las otras ciudades.

Nehemías 11:1 Meaning and Commentary

Nehemiah 11:1

And the rulers of the people dwelt at Jerusalem
Where it was proper they should, being the metropolis of the nation, both for the performance of their offices, and to protect and defend it, as well as to set an example to the people, and encourage them to dwell there also:

the rest of the people also cast lots to bring one of ten to dwell in
Jerusalem the holy city;
so called, because of the temple and the worship of God in it; and so it is called by Julian the emperor ^F7; and some ^F8 have thought that the Cadytis of Herodotus ^F9 is the same with Jerusalem, which had its name from (hvdq) , "holy", and is now called by the Turks "cuds", that is, "holy" ^F11: now, though it was the chief city, and the place of public worship, yet the people were not forward of settling in it, partly because of the rage of the enemy, which this city was the butt of, and partly because it was more to their worldly advantage to dwell in the country, and where they could have better supplies; they consulted their own ease, safety, and profit; wherefore this method was taken to oblige some to dwell in it, by taking one out of ten by lot, that there might be a sufficient number to rebuild the houses of it, repopulate and defend it:

and nine parts to dwell in other cities;
to which they belonged, or where they pleased, any where in the land of Israel.

---

FOOTNOTES:

F7 Ep. 25. p. 154.
F8 Prideaux's Connection, par. 1. p. 56, 57.
F9 Euterpe, sive, l. 2. c. 159. & Thalia, sive, l. 3. c. 5.
F11 Sandys's Travels, l. 5. p. 121. Ed. 5.

Nehemías 11:1 In-Context

1 Los jefes del pueblo habitaron en Jerusalén, pero el resto del pueblo echó suertes a fin de traer uno de cada diez para que habitara en Jerusalén, la ciudad santa, mientras los otros nueve se quedarían en las otras ciudades.

2 Y bendijo el pueblo a todos los hombres que se ofrecieron para habitar en Jerusalén.

3 Estos son los jefes de la provincia que habitaron en Jerusalén (en las ciudades de Judá cada cual habitó en su propiedad, en sus ciudades; los israelitas, los sacerdotes, los levitas, los sirvientes del templo, los descendientes de los siervos de Salomón,

4 algunos de los hijos de Judá y algunos de los hijos de Benjamín habitaron en Jerusalén): De los hijos de Judá: Ataías, hijo de Uzías, hijo de Zacarías, hijo de Amarías, hijo de Sefatías, hijo de Mahalaleel, de los hijos de Fares,

5 y Maasías, hijo de Baruc, hijo de Col-hoze, hijo de Hazaías, hijo de Adaías, hijo de Joiarib, hijo de Zacarías, hijo de Siloni.