Jeremías 23:16

16 Esto dice el Señor
de los Ejércitos Celestiales a su pueblo:
«No escuchen a estos profetas cuando ellos les profeticen,
llenándolos de esperanzas vanas.
Todo lo que dicen son puros inventos.
¡No hablan de parte del Señor
!

Jeremías 23:16 Meaning and Commentary

Jeremiah 23:16

Thus saith the Lord of hosts, hearken not unto the words of
the prophets that prophesy unto you
Do not hear them; stop your ears at what they say; give no credit to them. The Targum is,

``do not receive the words of the false prophets that prophesy unto you:''

they make you vain;
they filled their heads with vain and empty things, and their hearts with vain hopes, which deceived them; so the Targum,

``they deceive you;''

they taught them vain things, and made them vain and sinful in their lives and conversations; and therefore were not to be hearkened to: they speak a vision of their own heart, [and] not out of the mouth of
the Lord;
what they imagined they saw was a device of their own hearts, and what was agreeable to them, which must be bad enough; a produce of their own brains; an invention of their own; mere doctrines of men, and not such as come from the mouth of God, are his revealed will, and according to his word; and therefore not to be hearkened to; for nothing is to be heard and received, in matters of religion, but what is according to the revelation of God's will in his word; see ( Isaiah 8:20 ) . The Targum is,

``they speak to you the wickedness of their hearts, and not by the word of the Lord.''

Jeremías 23:16 In-Context

14 ¡Pero ahora veo que los profetas de Jerusalén son aún peores!
Cometen adulterio y les encanta la deshonestidad.
Alientan a los que hacen lo malo
para que ninguno se arrepienta de sus pecados.
Estos profetas son tan perversos
como lo fue la gente de Sodoma y Gomorra».

15 Por lo tanto, esto dice el Señor
de los Ejércitos Celestiales acerca de los profetas:
«Los alimentaré con amargura
y les daré veneno para beber.
Pues es debido a los profetas de Jerusalén
que se ha llenado esta tierra de maldad».

16 Esto dice el Señor
de los Ejércitos Celestiales a su pueblo:
«No escuchen a estos profetas cuando ellos les profeticen,
llenándolos de esperanzas vanas.
Todo lo que dicen son puros inventos.
¡No hablan de parte del Señor
!

17 Siguen diciendo a los que desprecian mi palabra:
“¡No se preocupen! ¡El Señor
dice que ustedes tendrán paz!”.
Y a los que obstinadamente siguen sus propios deseos,
los profetas les dicen: “¡No les sucederá nada malo!”.

18 »¿Ha estado alguno de estos profetas en la presencia del Señor
para escuchar lo que en realidad dice?
¿Acaso alguno de ellos se ha interesado lo suficiente como para escuchar?