Jeremías 26:8

8 pero cuando Jeremías terminó su mensaje, habiendo dicho todo lo que el Señor
le ordenó que dijera, los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo que estaba junto al templo lo atacaron en masa. «¡Mátenlo! —gritaban—.

Jeremías 26:8 Meaning and Commentary

Jeremiah 26:8

Now it came to pass, when Jeremiah had made an end of
speaking
For they let him alone till he had done, either out of reverence of him as a priest and prophet; or they were awed by a secret influence on their minds that they might not disturb him: all that the Lord had commanded [him] to speak unto all the people;
he did as he was ordered, kept back nothing, not fearing the resentment of the people, but fearing God: that the priests, and the prophets, and all the people, took him;
the priests and the prophets were the leading men in this action; they stirred up the people against him, and through their instigation he was seized and laid hold on: saying, thou shall surely die;
signifying that they would bring a charge against him, which they were able to support, and which by the law would be death; unless they meant in the manner of zealots to put him to death themselves, without judge or jury; and which they would have put in execution, had not the princes of the land, or the great sanhedrim, heard of it; and therefore to prevent it came to the temple, as is afterwards related.

Jeremías 26:8 In-Context

6 entonces destruiré este templo así como destruí a Silo, el lugar donde estaba el tabernáculo. Y haré que Jerusalén se convierta en objeto de maldición en cada nación de la tierra’”».

7 Los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo escucharon a Jeremías mientras hablaba frente al templo del Señor
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8 pero cuando Jeremías terminó su mensaje, habiendo dicho todo lo que el Señor
le ordenó que dijera, los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo que estaba junto al templo lo atacaron en masa. «¡Mátenlo! —gritaban—.

9 ¿Qué derecho tienes de profetizar en el nombre del Señor
que este templo será destruido como lo fue Silo? ¿Qué quieres decir cuando afirmas que Jerusalén será destruida y dejada sin habitantes?». Así que todo el pueblo lo amenazaba mientras él estaba frente al templo.

10 Cuando los funcionarios de Judá oyeron lo que pasaba, corrieron del palacio a sentarse a juzgar junto a la puerta Nueva del templo.