13
¡Levántate, oh Señor ! ¡Enfréntalos y haz que caigan de rodillas! ¡Con tu espada rescátame de los perversos!
14
Con el poder de tu mano, oh Señor , destruye a los que buscan su recompensa en este mundo; pero sacia el hambre de los que son tu tesoro. Que sus hijos tengan abundancia y dejen herencia a sus descendientes.
15
Porque soy recto, te veré; cuando despierte, te veré cara a cara y quedaré satisfecho.