8
Palabra que vino a JeremĂas del SEĂ‘OR, despuĂ©s que el rey SedequĂas hizo concierto con todo el pueblo en JerusalĂ©n, para promulgarles libertad
9
que cada uno dejara su siervo, y cada uno su sierva, hebreo y hebrea, libres; que ninguno usara de los judĂos sus hermanos como de siervos
10
Y cuando oyeron todos los prĂncipes, y todo el pueblo que habĂa convenido
en el pacto de dejar cada uno su siervo y cada uno su sierva libres, que ninguno usara más de ellos como de siervos, escucharon, y los dejaron
11
Pero después se arrepintieron, e hicieron tornar los siervos y
a las siervas que habĂan dejado libres, y los sujetaron por siervos y por siervas
12
Y vino palabra del SEĂ‘OR a JeremĂas, diciendo
13
AsĂ dice el SEĂ‘OR Dios de Israel: Yo hice Pacto con vuestros padres el dĂa que los saquĂ© de tierra de Egipto, de casa de siervos, diciendo
14
Al cabo de siete años dejarĂ©is cada uno a su hermano hebreo que te fuere vendido; te servirá pues seis años, y lo enviarás libre de ti; mas vuestros padres no me oyeron, ni inclinaron su oĂdo
15
Y vosotros os habĂais hoy convertido, y hecho lo recto delante de mis ojos, anunciando cada uno libertad a su prĂłjimo; y habĂais hecho pacto en mi presencia, en la Casa sobre la cual es llamado mi nombre
16
Pero os tornasteis y contaminasteis mi nombre, y tornasteis a tomar cada uno su siervo y cada uno su sierva, que habĂais dejado libres a su voluntad; y los sujetasteis para que os sean siervos y siervas
17
Por tanto, asĂ dijo el SEĂ‘OR: Vosotros no me oĂsteis a mĂ en promulgar cada uno libertad a su hermano, y cada uno a su compañero: he aquĂ que yo os promulgo libertad, dijo el SEĂ‘OR, a espada y a pestilencia, y a hambre; y os pondrĂ© en remociĂłn a todos los reinos de la tierra
18
Y entregaré a los hombres que traspasaron mi Pacto, que no hicieron firmes las palabras del Pacto que celebraron en mi presencia, dividiendo en dos partes el becerro y pasando por medio de ellas
19
a los prĂncipes de Judá y a los prĂncipes de JerusalĂ©n, a los eunucos y a los sacerdotes, y a todo el pueblo de la tierra, que pasaron entre las partes del becerro
20
los entregaré en mano de sus enemigos y en mano de los que buscan su alma; y sus cuerpos muertos serán para comida de las aves del cielo, y de las bestias de la tierra
21
Y a SedequĂas rey de Judá, y a sus prĂncipes, entregarĂ© en mano de sus enemigos, y en mano de los que buscan su alma, y en mano del ejĂ©rcito del rey de Babilonia, que se fueron de vosotros
22
He aquĂ,
que yo mando, dijo el SEÑOR, y los haré volver a esta ciudad, y pelearán contra ella, y la tomarán, y la abrasarán a fuego; y daré las ciudades de Judá a soledad, hasta no quedar morador