28
Ese encuentro ocurriĂł en Betania, una regiĂłn situada al oriente del rĂo Jordán, donde Juan estaba bautizando.
29
JesĂşs, el Cordero de Dios Al dĂa siguiente, Juan vio que JesĂşs se le acercaba y dijo: «¡Miren! ¡El Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo!